Importancia de un buen cálculo en la iluminación de una nave industrial desde la fase de diseño

¿Estás a punto de embarcarte en un proyecto de construcción de una nave industrial y quieres calcular cuál sería su coste? El coste final de una nave industrial dependerá de una serie de factores que desglosaremos más adelante. Si bien la constructora que elijas te presentará un presupuesto detallado incluyendo estos aspectos, es recomendable familiarizarse con ellos desde el principio. Esto te permitirá contar con una base sólida para tomar decisiones informadas.

Veremos cómo elementos como la planificación y el diseño resultan determinantes no solo para optimizar el presupuesto inicial, sino también para reducir el consumo energético a medio y largo plazo, todo ello sin comprometer la eficiencia operativa, la seguridad ni la productividad.

A lo largo de este artículo, abordaremos no solo los factores que influyen en la instalación del sistema de iluminación, sino también su impacto en el uso de la energía y en los costes de mantenimiento asociados.

Factores clave en el cálculo de la iluminación de una nave industrial

 

Para diseñar un sistema de iluminación eficiente en una nave industrial, es necesario considerar múltiples variables que afectan al tipo, cantidad y distribución de las luminarias. Al atender todos estos factores, podremos obtener una estimación bastante precisa de coste del sistema de iluminación.

 

Dimensiones de la nave y altura libre

 

Las dimensiones del recinto y la altura libre bajo techo influyen directamente en el cálculo de la iluminación de la nave industrial, ya que determinan tanto la cantidad de luminarias requeridas como el coste de instalación y el consumo energético asociado.

Es esencial calcular con precisión el número de puntos de luz necesarios y su distribución estratégica, asegurando una cobertura homogénea sin generar zonas con niveles de iluminación inadecuados. Al mismo tiempo, debe evitarse un sobredimensionamiento que suponga un coste innecesario en equipos y consumo.

La altura del recinto condiciona el tipo de luminarias a emplear:

• En naves con techos elevados, se recurre a campanas industriales de alta potencia (high-bay), normalmente con tecnología LED, que garantizan una iluminación potente y uniforme.
• Para espacios con alturas medias o bajas, se emplean luminarias de bajo montaje (low), que proporcionan una distribución lumínica adecuada sin exceder en intensidad ni consumo.

También debe tenerse en cuenta la geometría interna de la nave. Por ejemplo, en almacenes logísticos con estanterías de gran altura, es fundamental alinear las luminarias con los pasillos principales para evitar que las propias estructuras generen sombras o zonas de penumbra que comprometan la seguridad y la eficiencia operativa.

 

Instalación eléctrica requerida

 

Otro aspecto determinante en el coste total del sistema de iluminación industrial de la nave es la instalación eléctrica necesaria para su correcto funcionamiento. Una planificación eléctrica adecuada no solo garantiza el suministro y la operatividad del sistema, sino que permite prever la integración de soluciones inteligentes de gestión energética.

Incluir desde el inicio sistemas de control como sensores de presencia, reguladores de intensidad o temporizadores, no solo mejora la eficiencia, sino que también contribuye a un importante ahorro energético a medio plazo.

En la lista de elementos necesarios, se debe contemplar, además del dimensionamiento del suministro, la distribución de circuitos, el tendido de cableado, cuadros eléctricos y protecciones necesarias. No se debe pasar por alto para determinar el coste de la iluminación la previsión de alumbrado de emergencia en zonas de riesgo, lo cual requiere una instalación específica, independiente y conforme a la normativa vigente en materia de seguridad industrial.

 

Tipo de actividad y nivel de iluminación requerido

 

La actividad que se desarrollará en la nave es un factor decisivo para determinar el nivel de iluminación adecuado y saber su coste en una nave. Por ello, es fundamental contar con expertos en construcción industrial que comprendan las particularidades del sector y puedan ajustar la iluminación en función del uso real de cada espacio.

Un diseño eficiente debe sectorizar la nave por zonas funcionales: áreas de producción, almacenaje, oficinas, muelles de carga, etc. Por ejemplo, una línea de ensamblaje de precisión requerirá un nivel de iluminación mucho más alto que un área de almacenamiento de palets. Las oficinas, por su parte, exigen un entorno visual confortable, con una iluminación uniforme que favorezca la concentración sin fatiga visual.

Asignar a cada zona un nivel lumínico específico no solo mejora la seguridad y la productividad del personal, sino que también evita el sobredimensionamiento (exceso de luz y consumo innecesario) o la subiluminación (iluminación insuficiente y riesgo operativo).

Desde el punto de vista económico, ajustar el sistema de iluminación a las necesidades reales permite reducir tanto el número de luminarias como el consumo energético diario, logrando así un mejor balance entre inversión inicial y costes operativos.

 

 

Distribución de zonas según uso

 

El layout interno de la nave influye directamente en la estrategia de iluminación y, por consiguiente, en su coste global. Cada área tiene requisitos distintos. Aquí van algunos ejemplos:

• En zonas de producción las luminarias deben instalarse de manera que no generen sombras sobre la maquinaria o los puestos de trabajo.
• En almacenes con estanterías de gran altura, las luminarias deben concentrarse en los pasillos para garantizar una correcta iluminación vertical.
• Las zonas administrativas y de oficinas requieren una iluminación más suave y difusa que favorezca el confort visual y el rendimiento intelectual.

Un enfoque estratégico consiste en sectorizar la instalación eléctrica por zonas de uso, lo que permite encender únicamente las áreas en funcionamiento. Esta estrategia, además de optimizar el consumo energético, facilita futuras ampliaciones o rediseños sin necesidad de rehacer toda la instalación.

 

Aspectos normativos y de seguridad

 

El sistema de iluminación debe cumplir con la normativa vigente, tanto en materia de seguridad laboral como de eficiencia energética. Entre los principales marcos legales aplicables destacan el Real Decreto 486/1997, que establece las disposiciones mínimas de seguridad en los lugares de trabajo, y el Código Técnico de la Edificación (CTE). Asimismo, en entornos industriales específicos, pueden aplicarse normativas adicionales, como la certificación ATEX para zonas con riesgo de explosión debido a la presencia de productos inflamables.

Desde una perspectiva de costes, cumplir desde el inicio con estas normativas implica una inversión más precisa y efectiva, evitando reformas correctivas posteriores, que suelen ser más costosas y complejas. Además, estas exigencias legales suelen estar alineadas con el uso de tecnologías sostenibles, que garantizan una mayor durabilidad y eficiencia energética en el tiempo.

 

Tecnologías de iluminación y sistemas de control

 

Hoy en día, la tecnología LED es la opción más recomendable para la iluminación de naves industriales debido a su elevada eficiencia, larga vida útil y bajo mantenimiento. Es habitual combinar distintos tipos de luminarias LED —como campanas industriales, paneles LED o proyectores lineales— para maximizar la luz útil por vatio consumido en cada tipo de espacio.

En términos económicos, apostar por LED supone una reducción significativa en el coste operativo de la nave industrial, al disminuir tanto la necesidad de reposiciones como la factura eléctrica mensual. Aunque la inversión inicial sea superior a otras tecnologías tradicionales, el retorno se materializa en plazos cortos, especialmente en instalaciones con alta actividad.

A esto se suma la posibilidad de incorporar sistemas de control y automatización, como sensores de presencia, reguladores de flujo luminoso y sistemas de gestión horaria o de luz natural. Estas soluciones permiten adaptar la iluminación a la ocupación real de las zonas, atenuar la intensidad según la luz disponible o apagar zonas inactivas, generando ahorros energéticos significativos y contribuyendo a la sostenibilidad de la instalación.

Ayudas o subvenciones públicas para iluminación eficiente

 

Al emprender un proyecto de iluminación en una nave industrial, es clave informarse sobre los programas de ayudas y subvenciones disponibles, tanto a nivel autonómico como estatal o europeo. Iniciativas como los Planes Renove o los fondos europeos para eficiencia energética pueden reducir notablemente su coste inicial, permitiendo acceder a soluciones más avanzadas y sostenibles con menor impacto económico.

Para conocer con precisión a qué tipo de ayudas puedes optar, es necesario consultar con el ayuntamiento correspondiente al municipio donde se ubique el terreno de la futura nave. Además, organismos como las cámaras de comercio o las agencias de desarrollo local suelen ofrecer orientación técnica y administrativa para tramitar este tipo de subvenciones.

 

Costes a largo plazo

 

Cuando se calcula el coste real de la iluminación en una nave industrial, no basta con contemplar el precio de compra e instalación. Es fundamental evaluar también los costes operativos a lo largo del tiempo, incluyendo consumo energético, mantenimiento preventivo, posibles reparaciones y la reposición de equipos.

Por eso, una planificación inteligente debe tener en cuenta la vida útil del sistema de iluminación, apostando siempre que sea posible por tecnologías duraderas como el LED industrial y luminarias con grado de protección IP65 o IP66, especialmente en entornos exigentes donde hay presencia de polvo, humedad o vibraciones constantes. Esta elección no solo reduce el riesgo de fallos, sino que también minimiza los costes de mantenimiento a medio y largo plazo.

 

La importancia de un equipo técnico especializado

 

El diseño de un sistema de iluminación industrial no es una tarea sencilla. Requiere un equilibrio entre criterios técnicos, normativos y funcionales, y debe considerar tanto las necesidades operativas de la nave como los objetivos de rentabilidad del negocio.

Por eso, contar con un equipo técnico especializado en la construcción industrial y logística es esencial. En nuestro caso, desde Onilsa, trabajamos con profesionales expertos en diseño e instalación de iluminación para naves industriales, así como en el resto de disciplinas implicadas en la ejecución de este tipo de proyectos. Nuestro enfoque garantiza soluciones integrales de alta calidad, con presupuestos cerrados, sin desviaciones y siempre adaptados a las particularidades de cada proyecto.

En lo que respecta a la iluminación, diseñamos soluciones específicas para cada zona de la nave logística, asegurando eficiencia y funcionalidad. Se prevén distintos tipos de alumbrado según el uso del espacio:

• Alumbrado exterior: iluminación perimetral y de circulación, con una media de 20 lux. La zona de circulación cuenta con báculos para una mejor distribución de la luz.
• Alumbrado interior nave: diseñado para proporcionar una media de 200 lux, garantizando condiciones óptimas para el trabajo industrial.
• Zona de picking: reforzada con una iluminación media de 250 lux, adecuada para tareas de alta precisión.
• Oficinas: dotadas de un alumbrado específico con una intensidad media de 500 lux, que favorece el confort visual y la productividad.
• Alumbrado de emergencia: instalado con equipos autónomos y señalización en puertas y zonas de evacuación. En el almacén, se incorpora una central con regletas fluorescentes 1x58W y baterías de 1 hora de autonomía.

¿Quieres saber más? Contáctanos y descubre cómo podemos ayudarte a construir una nave industrial eficiente, segura y rentable desde el primer día.